Foliar y radicular: todo lo que debes saber
¿Qué es foliar y radicular?
La aplicación de fertilizantes puede realizarse de tres formas: al suelo (radicular), al follaje (foliar) y al agua de riego (fertirriego). En este artículo nos enfocaremos en las dos primeras formas: foliar y radicular.
Aplicación al suelo o radicular
La aplicación radicular, también conocida como aplicación al suelo, consiste en añadir los fertilizantes directamente al suelo en el que se encuentran las plantas. Esta es la forma más común y tradicional de aplicar los fertilizantes, ya que permite que los nutrientes se mezclen con el suelo y sean absorbidos por las raíces de las plantas.
Existen diferentes tipos de fertilizantes que se pueden aplicar al suelo, como los fertilizantes sólidos y los fertilizantes líquidos. Los fertilizantes sólidos pueden presentarse en diferentes formas, como polvo, granulados, macro-granulados, pastillas y bastones.
El polvo es utilizado tanto en la hidroponía como en el cultivo tradicional, y puede aplicarse directamente al suelo o diluirse en agua para obtener una solución nutritiva. Los granulados, por su parte, permiten una dosificación más precisa y liberan los nutrientes de forma gradual. Los macro-granulados son gránulos más grandes que liberan los nutrientes de manera progresiva. Las pastillas son fertilizantes completos y balanceados, diseñados específicamente para plantas de flor o de hoja. Y los bastones son fertilizantes concentrados en forma de "clavos" que se introducen en el suelo.
Por otro lado, los fertilizantes líquidos son aquellos que se encuentran en estado líquido y pueden ser aplicados directamente al suelo o diluidos en agua. Estos fertilizantes tienen un efecto inmediato, ya que las plantas pueden absorberlos fácilmente. Algunos fertilizantes líquidos pueden ser aplicados antes o después de la siembra, y pueden tener su origen en materiales químicos u orgánicos.
Aplicación al follaje o foliar
La aplicación foliar consiste en rociar los fertilizantes directamente sobre las hojas de las plantas. Esta forma de aplicación permite una absorción rápida y eficiente de los nutrientes, ya que las hojas tienen una gran superficie de contacto con el medio ambiente.
Los fertilizantes foliares suelen presentarse en forma líquida, ya que es más fácil de aplicar y se adhiere mejor a las hojas. Estos fertilizantes pueden ser aplicados mediante pulverización o mediante la adición de los nutrientes al agua de riego.
La aplicación foliar es especialmente útil en situaciones en las que las raíces de las plantas no pueden absorber los nutrientes de manera eficiente, como en suelos con pH desequilibrado o con deficiencia de nutrientes. También puede ser utilizada para suministrar nutrientes adicionales a las plantas en situaciones de estrés, como sequías o enfermedades.
Es importante tener en cuenta que la aplicación foliar no debe sustituir a la aplicación radicular, ya que las raíces son el principal órgano de absorción de nutrientes de las plantas. Sin embargo, la aplicación foliar puede ser una herramienta útil para complementar la fertilización radicular y mejorar la absorción de nutrientes en situaciones específicas.
La aplicación de fertilizantes puede realizarse de dos formas principales: al suelo (radicular) y al follaje (foliar). La aplicación radicular consiste en añadir los fertilizantes directamente al suelo, mientras que la aplicación foliar consiste en rociar los fertilizantes sobre las hojas de las plantas.
La aplicación radicular es la forma más común y tradicional de fertilizar las plantas, ya que permite que los nutrientes se mezclen con el suelo y sean absorbidos por las raíces. Los fertilizantes radiculares pueden ser sólidos o líquidos, y se presentan en diferentes formas, como polvo, granulados, macro-granulados, pastillas y bastones.
La aplicación foliar, por otro lado, permite una absorción rápida y eficiente de los nutrientes, ya que las hojas tienen una gran superficie de contacto con el medio ambiente. Los fertilizantes foliares suelen ser líquidos y se aplican mediante pulverización o mediante la adición de nutrientes al agua de riego.
Es importante tener en cuenta que la aplicación foliar no debe sustituir a la aplicación radicular, ya que las raíces son el principal órgano de absorción de nutrientes de las plantas. Sin embargo, la aplicación foliar puede ser una herramienta útil para complementar la fertilización radicular y mejorar la absorción de nutrientes en situaciones específicas.
En resumen, tanto la aplicación radicular como la aplicación foliar son formas válidas y efectivas de fertilizar las plantas. La elección de la forma de aplicación dependerá de las necesidades específicas de las plantas y de las condiciones del suelo y del cultivo.
Espero que esta explicación te haya ayudado a entender qué es el foliar y radicular. Si tienes alguna pregunta o comentario, no dudes en dejarlo a continuación. Estaré encantado de responder cualquier duda que tengas. ¡Hasta la próxima!
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